¡ Luna ! Contemplo extasiada tus sonrisas y gorgoritos, igual que observaba los de mis niños, Pablo y Dani, hace la friolera de 30 años.
Resulta que para cuando escribo de tus gorgoritos ya estás pataleando en las revueltas aguas de la piscina, te pasean en silla y nos regalas parlamentos en los que seguro nos cuentas cosas interesantes
Tú me vas a ganar en esta carrera, seguro que sí Luna, porque creces y aprendes muy rápido y yo sin embargo voy por el camino lento.
Todas tus evoluciones me resultan familiares y es que antes que abuela, yaya, amona, amoñi o como finalmente me llaméis, fui MAMÁ. Eso sí, en el siglo pasado.
Dani, no logro subir una foto de Luna así que te pongo a ti que te pareces mucho. Algún día lograre dominar la tecnica.